El título de esta serie concentra el contenido que se expresa en los cuadros y la llamada de atención que pretende transmitir en su conjunto. A través de una gama cromática intensa, que abunda en tonalidades calientes -naranjas, rojos, amarillos, marrones…- se nos presentan elementos del planeta que están dañados; ecosistemas que están sufriendo las consecuencias de las altas temperaturas, por efecto de la acción continuada y sin control de la actividad a escala industrial.
Esta serie nos sitúa en la línea temporal de lo inmediato y lo urgente, en la conciencia sobre los efectos presentes que ya está teniendo el calentamiento global para el ser humano y para el medio ambiente. En la alerta late implícita la necesidad del cambio para garantizar el futuro.
La utilización del color y la disposición de los trazos enfatizan la expresividad dramática de los cuadros. Las texturas y relieves complementan el mensaje con referencias al fuego y a distintos materiales.